Solo cabe esperar que esté disfrutando incluso más y mejor en su nueva vida que en la presente y trasladarle a su familia y amigos mi más sentido pésame...
Lo digo triste, porque te has ido Andrés Montes, no porque estés mal, que seguro que con el positivismo y alegría que nos trasladabas a todos con tu forma de ser, y eso que sólo te conocíamos de las retransmisiones de los partidos de fútbol y basket, y de algún que otro cruce en los pasos de peatones de Madrid, con tus trajes, camisas, y con tus sombreros al mejor estilo Humphrey Vogart, y siempre desde luego, la mejor sonrisa en su boca.
Fueron muchas noches de insomnio contigo, y con Daimiel, muchas noches que compartí al lado tuyo, en las que un partido de baloncesto era la escusa para una cita, una cita con una persona que contaba batallitas, y que las contaba con ilusión, con pasión , con entretenimiento y que además sabía de deporte, no solo de basket, y que era imposible que pasara inadvertido. Por que enseguida conectaba contigo, enseguida te atrapaba su forma de ser extrovertida, e ilusionante...
Soy uno más de la generación que no entenderá ver un partido de fútbol o basket sin que esté él, sin que haya una persona que comparta contigo un rato agradable y que te de algo más que nombrar a los jugadores, que comparta su forma de ver las cosas y que con sus frases y nombretes, te transmita tanta ilusión...
No puedo creerlo, pero creo que estarás bien estás donde estés ahora !!!
Vaya Crack !!!
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